Un padre es un tesoro,
un hermano es un consuelo: un amigo es ambos.
Benjamin Franklin.
Menos mal que tengo el bendito hábito de poner una alarma en la agenda de mi móvil para que me avise media hora antes de todos los compromisos y reuniones programadas, porque cuando éste suena y leo en la pantalla que hoy tengo la primera clase con Nacho en mi gimnasio me doy cuenta de que, de no ser así, se me hubiese olvidado totalmente. Continue reading